UNA FORMA DIFERENTE DE APRENDER MATEMÁTICAS
De la mano del profesor José Antonio Fernández Bravo, hemos aprendido a “tocar” las matemáticas con las manos, a aprender a superar retos, a pensar y a crear estrategias. Es decir, somos capaces de representar conceptos abstractos con objetos, siendo los principios metodológicos de estos aprendizajes la acción, la interacción, el juego, la personalización e individualización, el aprendizaje significativo y la construcción del significado.
El material que manejamos en el aula son las regletas, que no son ningún contenido curricular en sí mismas. Las matemáticas, sí lo son. A los alumnos/as se les ofrecerá la posibilidad de construir y descubrir conceptos matemáticos, a través de la manipulación del material y el diálogo. El uso de las regletas como material didáctico irá dirigido en todo momento, a plantear situaciones desafiantes y retos intelectuales que ayuden a generar ideas válidas en el alumno/a. No se trata de enseñar regletas, sino de enseñar matemáticas.
Con ello, se pretende favorecer la acción de los alumno/as a través de la manipulación, mejorando la actividad mental. El alumno se convierte en protagonista, es decir, son agentes de sus propios procesos de aprendizaje.
Los alumnos/as, al resolver los retos propuestos, construyen un conocimiento contextualizado, que pueden generalizar a otras situaciones de la vida real.
La presentación de las actividades siempre es lúdica. El material se presenta como un juego pensado para la edad de los alumnos a los que va dirigido.
Tratamos de atender al alumno/a de manera integral, con sus características, sus intereses, su identidad, sus problemas y, de este modo, favorecer la construcción del autoconcepto y la autoestima, que supone la aceptación de sí mismo y respeto por sus compañeros.
El alumno/a debe enfrentarse de manera individual al reto y después ponerlo en común con sus compañeros. Es una forma de aprender por descubrimiento, ser agente de tu propio aprendizaje, basado en la motivación y estimulación sensorial. El alumno/a aprende a aprender.
El maestro tendrá el papel de MEDIADOR entre el alumno/a y el material presentado, pudiendo resolver posibles dudas y conflictos, al mismo tiempo que observará la ejecución y resolución de las actividades. Además, el maestro tendrá un papel DINAMIZADOR, es decir, será capaz de promover el deseo de los alumnos/as a adquirir conocimiento, manejando las regletas.
A medida que crecen, los retos aumentan y los conceptos matemáticos presentados varían, apareciendo como nuevo material el NUMERATOR cuyos objetivos son:
– Comprender el significado decimal y «posicional» de nuestro sistema de numeración.
– Saber leer y escribir cualquier número comprendiendo su significado.
– Descubrir los algoritmos de las cuatro operaciones: Adición, sustracción, multiplicación división; sus propiedades y relaciones.
– Aprender el concepto de Número decimal; operaciones, relaciones, equivalencias y extensión matemática.
– Comprender el significado de un Sistema de Numeración cualquiera y saber operar.
– Descubrir la dinámica de relaciones matemáticas de los Polinomios y sus operaciones básicas.
– Desarrollar la creatividad del alumno.
– Desarrollar la capacidad de autocorrección.